
Hay una creciente coincidencia sobre la necesidad de proteger el medio ambiente y los recursos naturales, pero no sobre las medidas más indicadas para alcanzar este fin. Por lo general, se afirma que la defensa y promoción de estos valores es competencia del gobierno como garante del bien común, al tiempo que se establece una especie de contradicción esencial entre ecología y libre mercado. La postura de este libro es profundamente anti convencional ante estos actualísimos problemas. En él se demuestra que la intervención del gobierno a menudo agrava los problemas del medio ambiente y de los recursos naturales debido a una deficiente información y a una errónea política de incentivos.